
Por fin llegó el día y puedo asegurar a mis lectores que el guion de “La botella Nº 34: La estafa del Grupo Volkswagen o…. ¿Qué estafa? Está todo OK” se está cumpliendo en su mayor parte. Los “Volkswagen Boys” se han puesto las pilas y han demostrado al mundo entero que el verdadero poder sostienen en sus manos las grandes corporaciones. Los políticos son sus prisioneros. Incluso aquellos que quieren cambiar el mundo acaban rendidos ante la magia de su mantra: “Somos demasiado grandes para caer. Nuestra caída arrastrará la economía y hundirá el tibio crecimiento de la zona euro en una profunda recesión. ¿De verdad queréis esto? Mejor buscamos una salida y todos saldremos ganando”.
Que lejos quedan aquellos tiempos cuando los políticos que pretendían cambiar las reglas del juego recibían un tiro en la cabeza. Ahora a los que pretenden cambiar algo, se le da por adelantado el Premio Nobel de la paz y el asunto resuelto. Y a los que no saben si suben o bajan, se les da una de cal y otra de arena. Claro que todavía quedan algunos chulos, pero ellos acaban como los tristes payasos de un circo provincial: ganándose una limosna de las manos de aquellos que eran el objetivo de sus burlas. Bienvenidos a la realidad mis queridos soñadores de la ética, justicia y la igualdad. La comparecencia de Matthias Müller, CEO de Volkswagen AG y Hans Dieter Pötsch, Director del Consejo de Supervisión de Volkswagen AG, que se emitió hoy en streaming ha disipado todas las dudas.
La primera y más importante noticia: El consejero delegado del Grupo Volkswagen, Matthias Müller, ha dicho que las autoridades europeas “han evaluado positivamente” las soluciones para los clientes y que estas “se empezarán a implementar en enero de 2016”. Recordemos estas soluciones: ninguna indemnización a los consumidores europeos. Las reparaciones de los motores afectados por la estafa de las emisiones nocivas incluirán una reprogramación del software para el motor 2.0 TDI, y previsiblemente la misma solución para los motores 1.2 TDI. El motor 1.6 TDI es el único que requerirá modificaciones físicas. Concretamente la instalación de un conducto, y un filtro, que garantizan un control más preciso del aire en la cámara de combustión. Hablando en términos más comprensibles se trata de un tubo de plástico que solucionará el problema. Ni una palabra sobre las prestaciones, “no sufrirán cambios significativos”. A los clientes norteamericanos por el “defeat device” instalado en sus coches se les ofrecerán 500 dólares en efectivo y otros 500 en tarjeta de regalo para gastarse en la red de Volkswagen. Con su aceptación automáticamente renuncian a la vía judicial.
Segunda noticia: Los resultados de las investigaciones internas sobre la manipulación de las emisiones muestran que se produjo una conducta errónea con faltas personales en algunos empleados. Por tanto, el fabricante alemán ha reconocido que hubo deficiencias en algunos procesos, lo que favoreció la falta de ética laboral de algunas personas, por ejemplo en las pruebas que afectan a los dispositivos de control del motor. Todos los empleados culpables ya no forman parte de la plantilla de Volkswagen. La junta Directiva del consorcio automovilístico alemán no tenía ningún conocimiento sobre el fraude. Para sus directivos el escándalo que ha hecho que el Grupo Volkswagen con sus marcas, se vean últimos meses inmersas en una de las situaciones más complicadas de su historia, era una “desagradable sorpresa”. Las autoridades europeas están satisfechas con la investigación interna de Volkswagen.
Tercera noticia: Volkswagen ha confirmado que hay solamente 36.000 coches afectados por el problema de las emisiones de CO2 que se encontró posteriormente. Las autoridades también han dado el visto bueno a no devolver las ayudas a la compra de coche ecológico.
El presidente del consejo de supervisión de Volkswagen, Hans Dieter Pötsch, ha destacado la crisis de confianza que ha generado el escándalo de manipulación de las emisiones de gases contaminantes, sobre todo en vehículos diésel, obliga a la compañía centrase en la producción de coches más respetuosos con el medio ambiente. Especial hincapié se ha puesto en la nueva filosofía de Porsche que será la primera marca de coches deportivos y ecológicos a la vez. Por su parte el Sr. Müller dijo que el mayor valor del Grupo Volkswagen es la confianza de sus clientes. Confirmó que Volkswagen es completamente funcional en todo sentido y cuenta con la plena satisfacción de sus clientes.
Ninguna reflexión sobre si merecía la pena organizar una estafa mundial falseando las emisiones y poniendo en peligro la reputación de la compañía si todo el asunto era una simple rejilla de plástico y un nuevo software. Tampoco detalles sobre el crédito de 13 bancos por el importe de 20.000 millones de euros. Y por supuesto ni una sola palabra sobre el asunto de Qatar. Se supone que por la gracia del Alá el fondo catarí QIA no va a demandar a Volkswagen por el fraude del mercado de valores.
¿Qué se puede añadir a todo esto? ¿Qué comentario espera ver mi querido lector? Sobre la rueda de prensa de Volkswagen solo se me ocurre el “¡Manda huevos!” de Federico Trillo en el Congreso de los Diputados. Y sobre las autoridades europeas en Bruselas conformes con la investigación y las soluciones de Volkswagen solo cabe recordar la frase del escritor y diplomático belga, el mariscal y Príncipe Carlos José de Ligne: “Para ser imparcial, hay que tener muchos doblones en el bolsillo”. Lástima que doña Angela Merkel, la persona del año 2015 y “la canciller del mundo libre” por «Time» no lee mi blog. Me encantaría preguntarla si se siente feliz.